Caracas.- El jefe del Parlamento, Juan Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por más de 50 países, llamó este viernes a protestar contra la crisis la próxima semana, cuando se espera la visita de la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet.
Según una nota de prensa de su equipo, Guaidó pidió a los ciudadanos de su país manifestar en las calles los días 19, 20 y 21 de junio, en los que Bachelet permanecerá en Venezuela, «lo que está pasando en todo el país para que el régimen no pueda ocultar la tragedia».
«Hemos tenido años denunciando la sistemática violación de los Derechos Humanos y hemos conseguido que la ONU venga a Venezuela. Señora Michelle Bachelet bienvenida a Venezuela para buscar soluciones urgentes y atención directa a la emergencia humanitaria compleja», dijo, según el texto.
El líder opositor catalogó como un «logro de la democracia» la visita de la alta comisionada de derechos humanos.
«Tienen que ver lo que de verdad está pasando en el país. No permitir que los secuestren y los metan en unos salones, en unos hospitales parapetados, no señor; por eso las próximas semanas son claves», insistió.
Según anunció la oficina de la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Bachelet llegará a Venezuela el próximo 19 de junio, en una visita que durará tres días.
Durante su estancia, la también expresidenta de Chile se reunirá con el presidente venezolano, Nicolás Maduro, y con sectores de la sociedad civil.
En la agenda de Bachelet están previstas además reuniones con representantes de la opositora Asamblea Nacional (Parlamento), la oficialista Asamblea Constituyente y ministros venezolanos.
La visita de Bachelet a Venezuela se ha negociado durante varios meses y estuvo precedida por una misión de avanzada que viajó el pasado marzo al país para verificar que se reunían las condiciones para la llegada de la alta comisionada.
Su viaje se hará en el marco de una invitación que le cursó el Gobierno y que su propia oficina solicitó.
Las tratativas para concretar la visita han tenido que ver con la voluntad de Bachelet de prepararla de modo tal que no pueda ser utilizada por el Gobierno ni por ningún otro actor político para sus propios fines.