Una niña de un año murió este 5 de octubre tras permanecer cerca de una hora dentro de un coche cerrado en Las Vegas (EE.UU.), en condiciones climáticas adversas. De acuerdo con las autoridades, el padre de la bebé se negó a permitir que la Policía rompiera uno de los vidrios del vehículo para salvarla, informaron medios locales.
Sidney Deal, de 27 años, había olvidado accidentalmente las llaves dentro de su auto y acudió a unos patrulleros, que le ofrecieron llamar a un cerrajero, una grúa u optar por romper una ventana. Deal rechazó la ayuda, argumentando que no podía permitir que dañaran su coche nuevo, y aseguró que su hija, Sayah, estaba bien —pese a lo caluroso y soleado del día— porque el aire acondicionado estaba encendido.
El hombre optó por llamar a su hermano, que llegó al lugar inmediatamente, se envolvió la mano en una camisa y se ofreció a romper una ventanilla. Sin embargo, Deal lo detuvo y afirmó que no tenía suficiente dinero para arreglar el daño. En cambio, le pidió que llamara a la madre de Sayah para que se comunicara con la compañía de seguros y enviaran un experto.
Deal no aceptó el precio de los servicios de la aseguradora y finalmente los policías decidieron quebrar una ventana y sacar a la niña, que ya había fallecido. Su cuerpo tenía rigidez cadavérica y había dejado de moverse en el piso del asiento trasero, luego de estar encerrada aproximadamente una hora, detallan los informes policiales.
El padre fue arrestado e ingresado a un centro de detención en el condado de Clark (Nevada), bajo cargos de abuso y negligencia infantil. Su fianza fue estipulada en 20.000 dólares y se esperaba que compareciera ante un tribunal este jueves, pero no asistió debido a un problema médico.
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