El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha anunciado la suspensión de la vacuna contra el coronavirus, desarrollada por la farmacéutica AstraZeneca y la Universidad de Oxford, en el país.
En una rueda de prensa, el mandatario señaló que la medida fue tomada «por precaución» y estará vigente «hasta mañana por la tarde», cuando la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) publique su última guía sobre la vacuna.
«Por recomendación del [ministro de Salud francés] Olivier Véran, se decidió suspender el uso de la vacuna de AstraZeneca. Esperamos que la EMA publique un dictamen sobre el medicamento mañana por la tarde», detalló Macron.
Mientras tanto, Italia también ha confirmado que está suspendiendo el uso de la vacuna AstraZeneca en todo el país mientras espera un anuncio del regulador europeo.
La agencia de medicamentos de Italia, AIFA, señaló en un comunicado que la decisión se tomó en línea con otros países de la UE, enfatizando que se trata de una medida de precaución ya que no se había encontrado un vínculo causal entre los «eventos adversos graves» y la vacuna.
La medida se produce después de que la región del norte de Piamonte prohibiera el domingo el uso de un lote del fármaco tras la muerte de un maestro, que había recibido una dosis del lote el día anterior.
De esta manera, Francia e Italia son los últimos países en unirse a la creciente lista de naciones que han decidido suspender las inoculaciones con la vacuna de AstraZeneca ante los reportes de que algunas personas vacunadas desarrollaron coágulos sanguíneos. Poco antes, Alemania hizo un anuncio similar.
Respuesta de AstraZeneca
Por su parte, AstraZeneca comunicó el domingo pasado que no encontró pruebas de que su vacuna contra el coronavirus provoque un aumento del riesgo de la aparición de coágulos de sangre.
La empresa aseguró que llevó a cabo «una cuidadosa revisión» de todos los datos disponibles de más de 17 millones pacientes inoculados con su fármaco en la Unión Europea y el Reino Unido. Según subrayó la compañía, los resultados «no mostraron evidencia de un mayor riesgo de embolia pulmonar, trombosis venosa profunda o trombocitopenia, en ningún grupo de edad definido, género, lote o en ningún país en particular».
Dolencias previas
Algunos expertos señalan que debido a que las campañas de vacunación se están realizando primero para los individuos más vulnerables, es muy probable que esas personas ya estén sufriendo de dolencias previas, y por lo tanto es difícil comprobar que la vacuna es la responsable de algo que ocurre después.
Mientras, la portavoz de la Organización Mundial de la Salud, Margaret Harris, indicó la semana pasada que no hay razón para dejar de usar la vacuna contra el covid-19 de AstraZeneca.
Fuente RT