El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg se ha reunido este miércoles con los embajadores de Finlandia y Suecia ante la Alianza, para recibir formalmente su solicitud de ingreso en la organización militar.
La medida marca el paso formal de Helsinki y Estocolmo hacia la adhesión a la Alianza, iniciado tras el comienzo de la operación de Rusia en Ucrania.
«Ustedes son nuestros socios más cercanos y su adhesión a la OTAN aumentará nuestra seguridad compartida, declaró Stoltenberg. «Las solicitudes que han hecho hoy son un paso histórico, los aliados considerarán ahora los siguientes pasos en su camino hacia la OTAN», agregó.
Asimismo, el secretario general aseguró que la Alianza ya está actuando en la región del mar Báltico y «las fuerzas de la OTAN y sus aliados seguirán adaptándose según sea necesario».
El anuncio de Suecia y Finlandia sobre su decisión de solicitar el ingreso a la OTAN fue respaldado por casi todos los miembros de la Alianza. Sin embargo, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, manifestó que su Gobierno no apoyará la adhesión, ya que ambos países apoyan a las milicias kurdas de las Unidades de Protección Popular y del Partido de los Trabajadores de Kurdistán, organizaciones que Ankara considera terroristas.
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, comentó este lunes que Rusia «no tiene problemas» con Finlandia y Suecia a la OTAN, pero «una expansión de la infraestructura militar en esos territorios sin duda provocaría una respuesta» de Moscú.