La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) redujo una décima, del 1,3 % al 1,2 %, el crecimiento del PIB de la región para 2023, debido principalmente a «crecientes incertidumbres externas y restricciones internas».
Este dato supone una profundización de la desaceleración regional que el organismo de Naciones Unidos viene pronosticando. En su informe preliminar de diciembre auguró un crecimiento de 3,7 % en 2022, dato todavía por confirmar. En 2021, el avance fue del 6,7 % por el efecto rebote de la pandemia del coronavirus.
«A las alzas experimentadas por las tasas de interés a nivel mundial se agregaron las turbulencias financieras observadas a comienzos de marzo [la quiebra de varios bancos en EE.UU.] lo que ha acentuado la incertidumbre y volatilidad de los mercados financieros», dijo el organismo en un comunicado.
Los países de la región enfrentan «nuevamente en 2023 un espacio limitado para la política fiscal y monetaria», agregó.
Por subregiones, la que menos crecerá será Sudamérica, con el 0,6 %, frente al 3,8 % de 2022. Centroamérica y México lo harán en 2,0 % (3,5% en 2022) y el Caribe avanzará un 3,5% (5,8% en 2022).