El movimiento palestino Hamás disponía de mapas detallados de los asentamientos y bases militares de Israel para llevar a cabo el masivo ataque del 7 de octubre, informa The Wall Street Journal, que cita documentos secretos que militares y personal de rescate israelíes encontraron en los lugares de los asaltos.
Abu Obaida, portavoz de las Brigadas al Qassam, el ala militar de Hamás, afirmó este jueves en un mensaje de video que la planificación del ataque comenzó en 2021. El vocero indicó que las brigadas prepararon un plan detallado para convocar a 3.000 combatientes para la batalla y a otros 1.500 para operaciones de apoyo.
Por su parte, el exoficial de la inteligencia militar israelí, Michael Milshtein, declaró que «no hay nada que se acerque a este nivel de planificación en ninguno de los pasos que Hamás había dado en el pasado».
Manuales y mapas
Según el periódico, algunos de los militantes del movimiento palestino llevaban manuales tácticos en los que se detallaban los puntos débiles de los vehículos blindados del Ejército israelí.
Los documentos obtenidos por el diario también revelarían que Hamás pretendía, desde el principio, atacar no solo objetivos militares, sino también poblaciones y tomar rehenes. Por ejemplo, un documento de 14 páginas marcado como ‘alto secreto’ en árabe y fechado el 15 de junio de 2023 describe un plan de infiltración en la comuna de Mefalsim y la retención de civiles. El plan incluía el número de habitantes de la localidad y la hora aproximada de llegada de las tropas israelíes.
Los miembros del equipo de asalto de las Brigadas al Qassam debían abrir brechas en la valla de seguridad, mientras que otros realizarían disparos de «artillería». Una vez dentro, los militantes debían capturar prisioneros y mantenerlos como rehenes «para negociar», según el documento.
Almog Cohen, miembro de la Knéset (Parlamento israelí) que participó en los combates, confirmó a WSJ que los miembros de Hamás disponían de documentos especiales, y un mapa encontrado en el chaleco de un militante mostraba que los atacantes de la ciudad de Ofakim, cerca de Gaza, conocían la localidad al detalle.
«Puntos débiles» del Ejército israelí
Además, el periódico detalla que Hamás utilizó drones para lanzar granadas sobre las torres de observación de Israel, lo que aparentemente privó a los militares israelíes de al menos parte de la infraestructura necesaria para monitorear la frontera y la valla de seguridad.
Otro documento hallado mostraba los supuestos «puntos débiles» del principal tanque del Ejército israelí, Merkava, aconsejando a los atacantes disparar «a una distancia de 50 metros con un [lanzacohetes antitanque portátil] RPG-7 u otras armas».
Asimismo, se encontró una hoja con fotografías de ocho tipos de vehículos blindados israelíes, junto con breves indicaciones en árabe sobre sus puntos débiles y qué explosivos emplear para inutilizarlos.
Fuente RT