La Oficina del Vaticano informó la mañana de este lunes que aceptó la renuncia presentada por el obispo auxiliar de la arquidiócesis de Santo Domingo, Ramón Benito Ángeles Fernández.
Ángeles Fernández cumplió ayer domingo 17 de marzo los 75 años, edad de retiro de los obispos e inmediatamente presentó renuncia que fue aceptada este lunes 18.
El medio español InfoVaticana informó en febrero que el sacerdote está siendo vinculado a una denuncia por supuesta agresión sexual.
El diario InfoVaticana indica que, el Vaticano tuvo conocimiento de estos hechos en el año 2018. La denuncia llegó a Roma un año después de su ordenación episcopal. Lo más curioso, es que mientras el Vaticano investigaba la denuncia, fue designado rector de la Universidad Católica Santo Domingo en el año 2020.
Mons. Ramón Benito Ángeles Fernández estudió en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), donde obtuvo su título en Filosofía. Concluyó sus estudios teológicos en el Seminario Pontificio Santo Tomás de Aquino (SPSTA), recibiendo el título de licenciado en Ciencias Religiosas.
Fue profesor en la facultad de Teología y vicerrector académico del Seminario Pontificio Santo Tomás de Aquino. También llevó los movimientos juveniles Escoge y Onda Juvenil Católica a la República Dominicana. La denuncia contra Benito Ángeles data de cuando el obispo era vicerrector del seminario.
Además, el diario también se detalla que el arzobispo de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria Acosta, el entonces nuncio apostólico en República Dominicana, monseñor Jude Thaddeus Okolo y el actual obispo emérito de Baní, monseñor Príamo Tejeda, tenían conocimiento de lo ocurrido.
Abuso sexual en el seminario en 1994
Según InfoVaticana, se lee en la denuncia que llegó tanto a la Congregación de la Doctrina de la Fe como a la Secretaría de Estado, en 1994 la víctima, de 14 años de edad, se acercó al Seminario Menor de La Vega, allí habría sido abusado y habría tenido relaciones sexuales con Mons. Ángeles.
Fue la víctima la que contactó con un sacerdote de su confianza para contarle lo ocurrido. Este sacerdote puso en conocimiento de la Nunciatura mediante un detallado informe las acusaciones contra Benito Ángeles al enterarse de que su nombre había estado en diversas ternas para ser nombrado obispo.
La noticia de la existencia de este informe llegó al conocimiento de Benito Ángeles y viajó junto con el arzobispo de Santo Domingo a Nueva York (lugar a donde se trasladó a vivir la víctima) en 2017 para «negociar» con él buscando una reconciliación y pedirle perdón por lo ocurrido.
En estas «negociaciones» también intervino el obispo emérito de Baní, Mons. Príamo Tejeda, actualmente suspendido de cualquier ejercicio del Ministerio en público, el cual instó a la víctima a declarar ante el Nuncio para decir que lo hablado con el sacerdote que dio la voz de alarma habría sido en confesión y, por lo tanto, estaría sujeto al sigilo sacramental, como un modo de sellar la información para que esto implicara una violación del mismo. El informe entregado al Vaticano detalla que tanto la víctima como el confidente aseguran que dicha confidencia no fue en confesión.
La denuncia subraya que a pesar de todo esto, el arzobispo de Santo Domingo viajó a Roma para solicitar que Benito Ángeles fuese nombrado obispo auxiliar de su arquidiócesis. Petición que fue concedida al ser nombrado obispo auxiliar en agosto del 2017 por el Papa Francisco.
Caso bajo investigación
De acuerdo a InfoVaticana, durante estos meses de investigación, hemos tratado de ponernos en contacto con el acusado, pero sin éxito. Ni la archidiócesis de Santo Domingo ni la Nunciatura en Santo Domingo han puesto ninguna facilidad para poder preguntarle al obispo Benito Ángeles por esta acusación.
Además, dice que aún así, ni la Nunciatura ni la archidiócesis han desmentido a este medio tal acusación. Otras fuentes han subrayado a este medio «la complejidad» de este caso sin entrar en más detalles. Lo cierto es que desde 2018 se lleva investigando este asunto aunque por ahora no se han tomado medidas disciplinarias contra él. Este medio ha podido saber de fuentes solventes que la acusación contra el obispo Benito Ángeles llegó a varios Dicasterios romanos.
A falta de poco más de un mes para que presente la renuncia por motivos de edad, Benito Ángeles Fernández sigue siendo obispo auxiliar de la archidiócesis de Santo Domingo y rector de la Universidad Católica Santo Domingo.
Lo que resulta más sorprendente, es que el obispo aceptara la mitra sabiendo la acusación que pesaba sobre él. Quien sale también muy mal parado es el arzobispo de Santo Domingo Francisco Ozoria Acosta por haber promovido a Benito Ángeles como obispo sabiendo lo que ocurrió.
Quien también está bajo el punto de mira es el ex nuncio en República Dominicana, Thaddeus Okolo. Su último servicio como nuncio fue lograr que Benito Ángeles fuese nombrado obispo en julio del 2017. Un par de meses antes, Okolo abandonó el país caribeño y se trasladó como nuncio a Irlanda. Actualmente, es nuncio en República Checa.
Durante esta semana, ni la archidiócesis de Santo Domingo ni la Nunciatura en la República Checa han puesto facilidades para contactar con el arzobispo Francisco Ozoria y el nuncio Thaddeus Okolo.
Fuente Externa