Internacionales

Enfermera que mató a 7 bebés enfrenta nuevo juicio por intentar matar a un recién nacido

La enfermera británica Lucy Letby, condenada el año pasado a cadena perpetua por haber asesinado a siete bebés recién nacidos e intentar acabar con la vida de seis más, está siendo juzgada ahora por intentar matar a otro neonato.

Letby, de 34 años, enfrenta un nuevo juicio en el Tribunal de la Corona de Manchester (Reino Unido), donde ha sido acusada de manipular el tubo respiratorio de una bebé prematura menos de dos horas después de su nacimiento. El hecho ocurrió el 17 de febrero de 2016, mientras trabajaba en la unidad neonatal del Hospital Countess of Chester de Liverpool, recoge el diario The Guardian.

Durante las audiencias del caso, realizadas esta semana, los fiscales aseguraron que la acusada fue «sorprendida prácticamente con las manos en la masa» por el pediatra Ravi Jayaram. Según su testimonio, entró a la sala de cuidados intensivos de la unidad neonatal y la enfermera estaba parada junto a la incubadora de la recién nacida, «sin hacer nada» a pesar de que sus niveles de oxígeno en la sangre bajaban y las alarmas del monitor no sonaban, precisa Sky News. Además, se dice que en las horas siguientes, en el mismo turno, supuestamente interfirió con los tubos de reemplazo del bebé en dos ocasiones más, en un intento de cubrir sus huellas.

La "cínica y cruel" estafa de una asistente médica para aprovecharse de sus pacientes con cáncer

«No hice nada para interferir»

Al brindar testimonio este martes, Letby afirmó no recordar el incidente en cuestión y negó haber intentado lastimar a algún bebé bajo su cuidado. Cuando el fiscal Nick Johnson le preguntó concretamente por el tubo endotraqueal, respondió: «Conozco mis acciones y sé que no desplacé ese tubo«. «No recuerdo lo que pasó esa noche, pero sé que no hice nada para interferir», añadió.

La sindicada manifestó ante el tribunal que la política del hospital en situaciones como la de la niña era esperar y ver si la deficiencia se «autocorregía», en lugar de intervenir inmediatamente. También dijo que, según su experiencia, no se acostumbraba meter las manos inmediatamente en las incubadoras, porque «a menudo» los bebés se estabilizaban solos «con bastante rapidez».

Al respecto, Elizabeth Morgan, asesora de enfermería, aseguró que dejar que la bebé «se autocorrija» no sería una «política de enfermería normal», particularmente en el caso concreto de la víctima, ya que se trataba de una paciente nacida 15 semanas antes de tiempo y con un peso menor a los 500 gramos. El fiscal Johnson cuestionó la posibilidad de que lo que decía Letby se aplicara a recién nacidos prematuros.

La bebé en cuestión, cuya identidad se prohibió revelar por orden judicial, nació de 25 semanas y fue trasladada a un hospital especializado poco después de los hechos que involucraron a Letby, debido a su extrema prematuridad. Falleció tres días más tarde, pero la fiscalía no considera que la acusada haya tenido algo que ver con eso.

El juicio se reanudará la próxima semana, cuando un juez resuma los hechos del caso ante un jurado después de los alegatos finales de los abogados defensores y de los fiscales.

Fuente RT

Related Posts