El presidente de EE.UU., Donald Trump, dijo este martes, 7 de enero, que «se salvaron muchas vidas» al matar al general iraní Qassem Soleimani y afirmó que Soleimani era «un terrorista» con un pasado «horrible». Además, argumentó que el general estaba «viajando con el jefe de Hezbolá» y que estaban «planeando algo».
En declaraciones desde el Despacho Oval, este martes, el presidente estadounidense sostuvo sobre Soleimani: «Le han llamado monstruo, y era un monstruo. Y ya no es un monstruo; está muerto». «Salvamos muchas vidas al acabar con su vida. Se salvaron muchas vidas. Estaban planeando algo», agregó Trump, que también calificó al general iraní de «terrorista».
El inquilino de la Casa Blanca ofreció este miércoles una rueda de prensa en la que anunció «sanciones económicas adicionales» inmediatas contra Irán —sin dar más detalles—, después de que el país persa atacara unas horas antes dos bases iraquíes con presencia de soldados estadounidenses. Asimismo, Trump aseguró que Washington mantendrá la máxima presión sobre Teherán y pidió a la OTAN que «se involucre más en el proceso de pacificación de Oriente Medio».
Asimismo, instó a Reino Unido, Francia, Alemania, China y Rusia a romper el acuerdo nuclear alcanzado en 2015 con Teherán y suscribir uno nuevo «que haga del mundo un lugar más seguro y pacífico». Además, detalló que el ataque de Irán no causó víctimas en Irak. «No vamos a tolerar nunca su campaña de terror», espetó Trump.
Retirada de las tropas
El presidente Trump también abordó el tema de la retirada de tropas de Estados Unidos de Irak y ha opinado que sería lo peor para el país.
Los comentarios del mandatario norteamericano se produjeron a raíz de una misiva que el Ejército estadounidense dijo que había sido enviada por error al primer ministro iraquí, aparentemente aceptando una solicitud de los parlamentarios de ese país para retirar las tropas.
Al respecto, Trump sostuvo que le gustaría retirar las tropas en algún momento, pero dijo que «este no es el punto correcto».
Escalada de la tensión
El pasado 3 de enero un ataque aéreo estadounidense con drones en Bagdad acabó con la vida del comandante iraní Qassem Soleimani, así como con la de uno de los principales generales militares de Irak, Abu Mahdi al-Muhandis.
Como represalia, la madrugada de este miércoles Irán ha atacado con misiles balísticos la base aérea de Al Asad, en Irak, que alberga tropas estadounidenses. Todavía se desconocen los daños causados, aunque medios iraníes sostienen que hubo 80 víctimas mortales.
Además, el entierro de Soleimani este martes sorprendió con una nueva tragedia, al producirse una estampida que dejó 50 muertos y 200 heridos.