La oleada de explosiones de diferentes dispositivos electrónicos, como radios personales bidireccionales (‘walkie-talkies’) y localizadores (buscapersonas o ‘beepers’), pertenecientes al grupo chiita Hezbolá, estremeció esta semana al Líbano, dejando al menos 37 muertos y miles de heridos.
El devastador ataque, del que Hezbolá y las autoridades libanesas culpan a Israel, ha centrado la atención en estos artefactos y su procedencia, que, por ahora, sigue suscitando más preguntas que respuestas.
¿Quién fabricó los buscas en poder de Hezbolá?
Según informes, los dispositivos fueron producidos por la compañía Gold Apollo, con sede en Taiwán. Reuters analizó imágenes de buscapersonas destruidos, en cuya parte posterior se observan pegatinas coincidentes con los fabricados por la firma. Además, una fuente de seguridad libanesa de alto rango dijo a la agencia que Hezbolá le había encargado 5.000 ‘beepers’.
No obstante, el fundador y presidente de Gold Apollo, Hsu Ching-kuang, declaró a los medios que los buscapersonas utilizados en las explosiones no fueron fabricados por su empresa, sino por una compañía llamada BAC Consulting, establecida en Budapest, Hungría, que tiene licencia para usar su marca.
«El producto no era nuestro. Lo único que tenía era nuestra marca«, explicó desde las oficinas de la empresa en Taipéi. «Solo proporcionamos autorización de marca registrada y no tenemos ninguna participación en el diseño o fabricación de este producto», agregó, en relación con el modelo AR-924.
Hsu declaró que no sabe cómo podrían haber sido manipulados los buscapersonas para que explotaran y que su firma también se sintió víctima del ataque. «Esto es muy vergonzoso», indicó.
Empresa fachada controlada por el Mossad
Según afirmaron tres oficiales de inteligencia al tanto de la operación a The New York Times, BAC Consulting sería una empresa fachada controlada por la inteligencia israelí. Los agentes del país hebreo vieron una oportunidad en la decisión del líder del grupo chiita, Hassan Nasrallah, de ampliar el uso de buscas en la comunicación de la organización y dejar de lado los teléfonos móviles, los cuales consideraba operativamente inseguros.
Incluso antes de tal decisión del jefe de Hezbolá, Israel había puesto en marcha un plan para establecer una empresa fantasma que se haría pasar por un productor internacional de ‘beepers’. De acuerdo con las fuentes, esa firma era BAC Consulting, la cual fue contratada para producir los dispositivos en nombre de la compañía taiwanesa, Gold Apollo.
Las personas consultadas señalaron al periódico que otras dos empresas fachada se crearon para ocultar la verdadera identidad de los fabricantes de los dispositivos de comunicación destinados al grupo chiita libanés.
Por su parte, la empresa húngara negó las acusaciones. «Yo no fabrico los buscapersonas. Solo soy la intermediaria. Creo que se equivocaron», afirmó al respecto la directora ejecutiva de BAC Consulting, Cristiana Bársony-Arcidiacono, citada por NBC News. Esto también fue confirmado por Zoltán Kovács, vocero de la oficina del primer ministro húngaro, quien declaró que «los dispositivos mencionados nunca estuvieron en Hungría», detallando que BAC Consulting «solo fue un intermediario comercial».
Sin embargo, el rastro parece volver a BAC, luego de que Bloomberg reportara que un edificio en París, que figuraba como dirección del director general de la compañía, resultó ser un cuartel de la Gendarmería francesa.
Por otra parte, las autoridades de Bulgaria también han desmentido reportes de medios de comunicación según los cuales la empresa búlgara Norta Global Ltd. estaría implicada en el suministro de los localizadores que explotaron en Líbano, según informó este jueves la agencia de seguridad estatal DANS.
¿Y los ‘walkie-talkies’?
El fabricante japonés de equipos de radio Icom dijo que está investigando la información sobre la explosión de aparatos de radio bidireccionales con su logotipo en el Líbano. De tal modo, anunció que publicarán información actualizada sobre el asunto en su sitio web a medida que esté disponible.
Las radios portátiles utilizadas por Hezbolá detonaron el miércoles en varias partes del Líbano. Se informa que en las imágenes de los ‘walkie-talkies’ destruidos se ven etiquetas de «Icom» y de «made in Japan» (fabricado en Japón).
El miércoles, en la segunda ola de explosiones relacionadas con los dispositivos electrónicos murieron al menos 25 personas y cientos resultaron heridas en toda la nación. La agencia de noticias estatal libanesa dijo que algunas de las explosiones se produjeron en una marca de radio bidireccional, y que las imágenes de las escenas de las explosiones mostraban ‘walkie-talkies’ Icom con el número de modelo V82.
Fuente RT