Varias ciudades de Haití, incluida su capital, Puerto Príncipe, continúan paralizadas a causa de la masiva protesta popular contra la escasez de combustible, que ha originado varias manifestaciones desde la pasada semana, en las que ya se ha registrado un muerto, según informó Efe.
La protesta ha originado duros enfrentamientos con las autoridades, en los que hubo lanzamiento de piedras, barricadas de neumáticos ardientes cortando las vías públicas e incluso tiroteos.
Las calles de Puerto Príncipe estaban prácticamente vacías este miércoles, sin actividad en el sector comercial, ni en los servicios de transporte ni en la administración pública.
Se agudiza la crisis
Haití sufre una grave escasez de combustible desde el pasado mes de agosto. Los manifestantes acusan a muchos propietarios de gasolineras de vender su producto en el mercado negro para su propio beneficio.
El director general de la Oficina de Monetización de los Programas de Ayuda al Desarrollo (BMPAD), Fils-Aimé Ignace Saint-Fleur, anunció oficialmente a la prensa a principios de este mes la llegada de dos cargamentos que sumaban un total de 258.000 barriles de petróleo. En esa ocasión, hace ya quince días, prometió que la distribución estaba a punto de comenzar.
Haití atraviesa en la actualidad una profunda crisis política y económica que ha empeorado en los últimos meses. El 31 de mayo, el Tribunal Superior de Cuentas de Haití acusó al presidente haitiano, Jovenel Moïse, por malversación de fondos en relación al escándalo de corrupción de PetroCaribe, nombre bajo el cual se conoce al acuerdo de cooperación energética impulsado por Venezuela. Este caso ha salpicado al menos a tres presidentes de la isla.
¿A qué se debe la crisis?
El Gobierno debe a los proveedores de combustible alrededor de 100 millones de dólares en pagos atrasados, por lo que estos se han negado a entregar productos derivados del petróleo. La situación ha repercutido en escasez de gasolina en la isla.
La deuda del Gobierno haitiano lleva varios meses y ha sido un tema recurrente desde que inició 2019. En febrero pasado, la empresa estadounidense Novum Energy Trading Corporation suspendió la entrega de cargamentos de derivados de petróleo a la isla, lo que provocó apagones en la conexión eléctrica y desabasto de gasolina en varias estaciones.
La adquisición de gasolina en Haití se volvió más difícil a partir de la crisis en Venezuela. La delicada situación económica que atraviesa la nación suramericana, agravada por las sanciones estadounidenses, obligó a Caracas a detener el mecanismo de cooperación que facilitaba combustible subsidiado a varios países de la región caribeña.
De ahí que el Gobierno haitiano ahora debe pagar más dinero por los productos derivados del petróleo, incluida la gasolina.