La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, provocó una fuerte polémica al revelar que le había regalado al presidente Alberto Fernández un libro que cuenta el devenir del Gobierno de Raúl Alfonsín (1983-1989), quien tuvo que renunciar de manera anticipada como resultado de una de las peores crisis económicas que ha tenido el país.

El libro se titula ‘Diario de una temporada en el quinto piso’ y fue escrito por el sociólogo Juan Carlos Torre, quien formó parte del equipo de Juan Vital Sourrouille, exministro de Economía de Alfonsín.

La influencia de Fernández de Kirchner quedó demostrada de inmediato, ya que el libro comenzó a tener una demanda inusitada y dos días después ya estaba agotado.

«Es una crónica histórica, no es una obra literaria, no va a ganar ningún Premio Nobel, pero relata las experiencias del primer Gobierno democrático desde el 83, el del presidente Alfonsín, y de los distintos equipos económicos que lo sucedieron», contó la vicepresidenta durante un evento en el que conmemoró el 40 aniversario de la Guerra de las Malvinas y que fue alternativo al que encabezó el presidente, ya que ambos mantienen profundos desacuerdos.

De hecho, Fernández de Kirchner también aprovechó su discurso para acentuar la confrontación con los funcionarios que están de parte del mandatario.

«Hoy se lo mandé al presidente para que luego la vocera no diga que no le mando nada en su cumpleaños. Ya veo que dice: ‘miren si será mala la vicepresidenta que ni siquiera le da un regalo de cumpleaños’, así que le mandé el libro que es muy interesante», dijo al referirse a una conferencia de prensa en la que la portavoz Gabriela Cerruti confirmó que Fernández le había escrito un mensaje de texto a la vicepresidenta y ella no le había contestado.

Fernández de Kirchner aseguró que el libro es «de una extraordinaria actualidad», lo que se interpretó como un vaticinio pesimista para el presidente, ya que durante el último año del Gobierno de Alfonsín los argentinos padecieron una hiperinflación, los precios subían mensualmente el 500 %, había saqueos, protestas y pobreza. La crisis económica, social y política detonó y, al final, el presidente le tuvo que entregar el poder de manera anticipada a Carlos Menem.

Funcionarios cercanos al presidente consideraron en varias columnas políticas, en las que declararon fuera de grabadora, que el regalo sugiere que ese es el destino que le espera a Alberto Fernández.

Las redes sociales, en tanto, se colmaron de chistes sobre lo que los usuarios consideraron como «indirectas» de la líder política más importante del país sudamericano, y quien ha manifestado su total desacuerdo con la política económica ejecutada por el presidente y el ministro de Economía, Martín Guzmán.