El presidente de Colombia, Iván Duque, ha firmado un proyecto de ley que reduce la jornada laboral de 48 a 42 horas semanales. La ley 2101 de julio de 2021, radicada en 2019 y liderada por el expresidente y entonces senador del Centro Democrático, Álvaro Uribe, fue aprobada por el Congreso el pasado 17 de junio y se hará de manera gradual.
Es decir, trascurridos dos años a partir de la entrada en vigencia, la semana laboral pasará de 48 a 47 horas, al siguiente año se reducirá una hora más y al cabo del cuarto año disminuirá en dos cada año, hasta alcanzar las 42 estipuladas.
«La duración máxima de la jornada ordinaria de trabajo es de cuarenta y dos (42) horas a la semana, que podrán ser distribuidas, de común acuerdo, entre empleador y trabajador, en cinco o seis días a la semana, garantizando siempre el día de descanso», señala el texto que modifica el artículo 161 del Código Sustantivo del Trabajo.
La medida no implicará la reducción del salario de los trabajadores ni de las prestaciones y respeta los derechos adquiridos en los contratos laborales. Tampoco modificará «el valor de la hora ordinaria de trabajo, ni exonera de obligaciones en favor de los trabajadores», subraya el artículo 4 de la ley. Por otro lado, obliga al Ministerio de Trabajo a realizar mesas técnicas con gremios y sindicatos para plantear propuestas para mejorar la productividad laboral.
Controversia
De acuerdo con la congresista María del Rosario Guerra, la iniciativa es «un gran avance que debe traducirse en mayor productividad y mejores condiciones de vida para los trabajadores».
Desde el Congreso, donde se le dio el visto bueno al proyecto, suponen que permitirá a los empleados aprovechar el tiempo libre para compartir en familia, descansar o estudiar.
En este orden de ideas, se espera que estas nuevas condiciones generen bienestar a los trabajadores y esto contribuya al aumento de la productividad de las empresas, y en consecuencia de la del país.
Entre tanto, el sector privado empresarial se opuso desde un principo al visto bueno del Congreso. Bruce Mac Master, director de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), cree que llega en mal momento y va en contravía de la recuperación económica que afronta el país producto de los estragos de la pandemia de coronavirus. «Pese a que le pedimos varias veces al Congreso que considerara un proyecto de generación de empleo, parece que esta situación no es una prioridad para ellos, es sorprendente que no hayan visto el clamor de los jóvenes y madres cabeza de familia que piden oportunidades de trabajo», afirmó.
El presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), Jaime Alberto Cabal, también considera inviable la reducción horaria en el marco de las actuales circunstancias económicas. En su opinión estimulará el trabajo informal, incrementará los gastos laborales y no generará empleos. Rosmery Quintero, presidenta de la Asociación Colombiana de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Acopi), insiste en la inconveniencia del proyecto para el gremio empresarial, que se encuentra en una etapa de adaptación, recoge el diario local El País.
La propuesta nace del hecho de que Colombia encabeza el listado de los países con peor balance entre la vida familiar y laboral, siendo que el 27 % de sus habitantes trabaja más que el promedio. Una encuesta del Departamento de Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE) concluyó que los colombianos trabajan un aproximado de ocho horas y 25 minutos al día y el promedio semanal de trabajo es de 47,8 horas los hombres y 42,3 las mujeres. No obstante, se trata de una carga horaria que no ha provocado aumentos significativos en la productividad.
Fuente RT