Portada

El Talibán celebra la retirada de EE.UU. y toma el control del aeropuerto de Kabul

El grupo fundamentalista se apoderó del aeropuerto internacional Hamid Karzai luego de que despegara el último avión de Estados Unidos, dando fin a 20 años de guerra en Afganistán. Mientras celebran su victoria, los talibanes buscan alianzas con Turquía para que este país opere el puente aéreo, con la promesa de que los vuelos comerciales continúen para quienes quieran irse de Afganistán. Aún quedan muchas preguntas sobre la mesa.

Con una ráfaga de disparos en Kabul, los talibanes marcaron su celebración por la retirada final de Estados Unidos. Festejaban lo que ellos afirman, es el comienzo de la «independencia» tras 20 años de guerra.

Un video distribuido por el mismo grupo mostraba cómo sus milicias entraban al aeropuerto Hamid Karzai luego de que el último avión de carga C-17 de las tropas estadounidenses hubiera despegado antes de la medianoche del 30 de agosto.

“Esta independencia es de toda la nación y todo nuestro pueblo estuvo involucrado en ella. Han sufrido penurias en estos 20 años, los felicito a todos”, fueron las primeras palabras de Zabihullah Mujahid, el portavoz del Talibán, al canal ‘RTA’ una vez estuvo dentro del aeródromo.

Al frente suyo estaban los miembros de la unidad de élite Badri 313, el equipo militar mejor equipado y capacitado que tiene el Talibán, y cuyos uniformes contrastan con el turbante y las sandalias de los combatientes tradicionales. Muchas de sus armas pertenecían a los estadounidenses.

Fue esa unidad la que tomó el control total del aeropuerto y la que posó para las fotografías. “El aeropuerto de Kabul está totalmente bajo el control del Emirato Islámico (como se autodenomina el Talibán) y está completamente asegurado. Nuestras fuerzas muyahidines (quienes luchan por la guerra santa) están en cada parte del aeropuerto y nosotros garantizamos que estará seguro”, señaló Mujahid.

Y mientras el Talibán mostraba a sus hombres tomar el control, las fuerzas militares de Estados Unidos difundieron una ya icónica fotografía. Se trata del mayor general Chris Donahue, comandante de la 82 División Aerotransportada del Ejército de EE. UU., y quien se convirtió en el último militar de ese país en abordar el viaje final de evacuación.

¿Qué pasará con el principal aeropuerto de Afganistán?

Uno de los mayores retos que tiene el Talibán será la administración del aeropuerto internacional, el principal puerto de entrada de los suministros de ayuda y las operaciones en el país. De hecho, la semana anterior la OMS advirtió que sin el acceso a ese aeródromo, muchos implementos clínicos comenzaban a escasear en Afganistán.

Al respecto, Mujahid anunció que habrá un plan para que el aeropuerto pueda reanudar sus actividades y reiteró la promesa que ya había hecho el Talibán de permitir los vuelos comerciales para quienes se quieran ir, pero antes reiteró el llamado a quedarse en el país.

“Queremos que nuestros residentes no se preocupen, Afganistán es nuestra casa común, nos quedaremos aquí, no debemos escapar y no tener miedo. En segundo lugar, si la gente quiere irse para elegir una vida segura, se lo facilitaremos; pero de manera legítima, deben tener una visa y así podrán volar por el aeropuerto”, señaló.

Aunque esa ha sido la postura pública del Talibán, todavía la intención no es realizable porque no hay quién opere el aeropuerto. El grupo le ha pedido a Turquía que provea ayuda técnica para poner a funcionar el puente aéreo y, ahora, lo que se conoce es que está en conversaciones con el Gobierno turco y con el de Qatar para la operación comercial del aeropuerto, como anunció este martes el ministro de Relaciones Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, al canal ‘France 2’.

“La resolución del Consejo de Seguridad sobre la seguridad del aeropuerto debe ser implementada. Hay conversaciones en curso con los qataríes y turcos sobre la gestión del aeropuerto. Debemos exigir que el acceso al aeropuerto sea seguro”, precisó el funcionario galo.

Por su parte, el Gobierno de Recep Tayyip Erdogan advirtió desde el domingo que primero se necesitan ciertas reparaciones. Los informes de inspección que ha hecho Turquía muestran los daños que tienen las pistas, torres y terminales, incluidas las del lado civil del aeropuerto, y que deberán ser reparadas. “Se necesita personal para esto. Asimismo, se debe proporcionar el equipo requerido”, precisó el ministro de Relaciones Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglu.

La razón por la que el Talibán ha buscado a los turcos es que ese país, miembro de la OTAN, es el que ha sido responsable de la seguridad del puente aéreo en los últimos seis años.

Además, los gobiernos de Francia y Reino Unido están gestionando por la vía diplomática la creación de un corredor humanitario para garantizar que tanto los afganos como los extranjeros que quedan en el país y quieran irse de Afganistán, puedan hacerlo libremente. Pero hasta ahora, no ha habido ningún pacto al respecto.

El Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, calcula que cerca de 200 de sus ciudadanos continúan en territorio afgano; mientras que la canciller alemana, Angela Merkel, cree que todavía hay entre 10.000 y 40.000 empleados locales que trabajan para organizaciones humanitarias y que tienen derecho a ser evacuados a Alemania.

Otra de las preocupaciones es cuánto armamento dejaron las tropas extranjeras en Afganistán y que ahora estaría en manos del Talibán. El congresista republicano Jim Banks afirmó que el grupo fundamentalista ahora tiene equipos militares estadounidenses avaluados en más de 85.000 millones de dólares. Aunque el asesor de Seguridad Nacional estadounidense, Jake Sullivan, no habló de cifras, sí confirmó que “buena parte” del material de guerra que dejaron en suelo afgano ahora lo tiene el Talibán.

Al respecto, el general de la Infantería de Marina, Frank McKenzie, jefe del Comando Central del Ejército de EE. UU., sostuvo anteriormente que las tropas desactivaron 27 vehículos militares Humvees y 73 aviones para que no se puedan usar de nuevo.

¿Qué pasará con la seguridad de Afganistán?

Esta es la otra gran incógnita tras la salida de las tropas de EE. UU. y de la OTAN. La mayor amenaza que enfrentará el grupo Talibán es el Estado Islámico, su histórico contrincante y que en esta semana ya cometió un atentado que causó la muerte de más de 190 personas cerca del aeropuerto de Kabul.

En esa ocasión se trató de un atacante suicida que detonó un explosivo que llevaba consigo y que supone menos capacidad militar que un ataque conjunto. Pero la amenaza de un atentado mayor permanece. De hecho, Estados Unidos tenía preparado un dispositivo anti-misiles para responder a las amenazas que existían de más explosiones del Estado Islámico en Kabul. Y ahora ese dispositivo se desactivó con la salida de las tropas.

Sin embargo, el Talibán sostiene que garantizará la seguridad de todo el país. “Damos plena garantía a todos, nadie debería tener ninguna preocupación porque el Emirato Islámico está aquí para brindar seguridad, para garantizar la dignidad de las personas. Trabajamos en ello día y noche. Si Alá quiere, pronto se anunciará un gobierno, todas las oficinas gubernamentales reabrirán, los bancos y la economía empezarán a moverse, el país dará pasos hacia la prosperidad, lejos de la guerra y la inseguridad, y la gente volverá a su vida normal”, señaló Mujahid.

Pero los hechos muestran que el grupo todavía no controla todo Afganistán. En el valle de Panjshir, la única provincia que no está bajo el mando del Talibán, al menos siete de sus milicianos murieron tras un enfrentamiento el lunes por la noche.

El anuncio lo hizo el grupo de oposición anti-Talibán. Fahim Dashti, portavoz de las Fuerzas de Resistencia Nacional (NRF), un grupo leal al líder local Ahmad Massoud, explicó que los enfrentamientos ocurrieron en la entrada occidental del valle donde los talibanes atacaron las posiciones de las NRF.

Así, entre el festejo, los combates y la incertidumbre, comienza el nuevo control de los talibanes tras el punto final de las tropas extranjeras en Afganistán.

Related Posts