El Gobierno de Brasil considera la posibilidad de intervenir con las Fuerzas Armadas para garantizar la seguridad en la ciudad de Río de Janeiro, luego de que milicias parapoliciales incendiaran el lunes un tren y 35 autobuses.
El ministro de Justicia, Flávio Dino, afirmó este martes que sugirió al presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, enviar tropas del Ejército a la zona del conflicto, atribuido al crimen organizado.
«Estamos debatiendo el tema de la participación de las Fuerzas Armadas en algunas áreas», dijo Dino, según reporta G1. Y agregó que el mandatario ya mantuvo este martes una conversación con el ministro de Defensa, José Múcio, para conocer su opinión.
Las declaraciones del funcionario fueron hechas durante un evento por el lanzamiento del programa Salud con Ciencia.
La opinión de Lula
Este martes, en su programa Conversación con el Presidente, el líder del Partido de los Trabajadores (PT) aseguró que desea colaborar con las fuerzas federales, pero respetando a las autoridades locales.
«No queremos intervenir Río de Janeiro, no le queremos restar autoridad al gobernador, al intendente. Cuando Río tiene un problema, el problema es de todo Brasil, así como los incendios en la Amazonia. Queremos ayudar sin pirotecnia, con medidas concretas. Hay que combatir a los milicianos», sostuvo Lula.
Así, sostuvo que ya dialogó con el gobernador de Río de Janeiro, Claudio Castro, aliado del expresidente Jair Bolsonaro, que tras los ataques comparó la situación de la ciudad con «la violencia de México o Colombia».
Según explicó el presidente, su intención es contribuir con las Fuerzas Armadas para poner los aeropuertos y puertos bajo control de la Fuerza Aérea y la Marina, y con la Policía en las calles.
«La Policía Federal actuará con más fuerza. Por lo tanto, el Gobierno federal actuará más en las carreteras. Queremos compartir la solución a los problemas que tienen los estados. No queremos lavarnos las manos y decir que el problema pertenece a los estados. No. Es un problema de Brasil«, aseguró el mandatario.
Milicias parapoliciales incendiaron este lunes más de 35 autobuses y un tren en la zona oeste de Río, como represalia después que la Policía matara al sobrino del líder de la mayor banda criminal del estado, Matheus da Silva Rezende, conocido como ‘Faustão’.