El destacado pintor y arquitecto dominicano Alejandro Santana iniciará mañana miércoles, a las 10:00 a.m., las visitas guiadas a su exposición Repatrimento, la cual incluye una instalación inédita y más de 200 cuadros y dibujos representativos de su trayectoria artística.
La Galería Nacional de Bellas Artes será el escenario que recorrerán los asistentes a la primera de las jornadas encabezadas por Santana, desde los jardines del palacio estatal, para dar a conocer la historia detrás de la retrospectiva y de la instalación.
Las visitas guiadas serán realizadas todos los días de la semana, para un grupo máximo de diez personas. Los interesados deberán reservar su cupo previamente, llamando al teléfono: 829-586-9177.
Abierta al público hasta el 1ro. de abril de este año, la exposición muestra las diferentes etapas pictóricas del artista: realismo, clasicismo, naturalismo, expresionismo, arte abstracto y pop art; por lo que es una interesante opción para coleccionistas, historiadores y amantes del arte dominicano.
Persigue “enterrar los legados de opresión y sufrimiento, mediante gritos estéticos de rebelión y como testimonio de nuestras heridas; aunque respetando siempre la obra de arte y la belleza del quehacer artístico”, explica el pintor y arquitecto.
Santana puntualiza que “Repatrimento” es una palabra integrada por los vocablos “repatriar” y “pentimento” o capas de pintura bajo la capa final visible de un cuadro.
“Repatrimento” es un poemario visual que —respetando siempre la obra de arte y la belleza del quehacer artístico— integra oda, elegía y epopeya en el proceso de superar los traumas y las heridas del último siglo, con el bálsamo curativo del amor.
El artista y su trayectoria
Alejandro Santana emigró a Estados Unidos hace 40 años para estudiar arquitectura y pintura, disciplinas que ha mezclado con éxito en sus obras.
Toma de la arquitectura el sentido de la proporción, del diseño, de la composición y de la profundidad espacial; y, de la pintura, la sensibilidad a la temperatura del color.
“El color transforma mi arquitectura y el espacio, mi pintura”, afirma el criollo de regreso en su querida tierra natal.
Santana se define como un artista plástico y ecléctico que ha atravesado diversas etapas de evolución artística: realismo, naturalismo, clasicismo, expresionismo y, actualmente, abstracción y arte pop. También utiliza multitud de medios y recursos, entre ellos el video.
Sus obras han sido expuestas en varios museos de Estados Unidos y forman parte de colecciones privadas, tanto allí como en República Dominicana.
De él, ha escrito la crítica de arte Marianne de Tolentino: “Transmite un mundo palpitante, inasible en su totalidad y sucesión de gestos pictóricos. Invisible y visible, cada cuadro transmite variaciones íntimas, a veces sepultadas en la memoria por el presente, y los estremecimientos resultantes comunican una vitalidad intensa, hasta el punto de que el espectador siente una suerte de vértigo, cuando prolonga la mirada a esos espacios, espejos y espasmos de la pintura”.
Una instalación inédita
El artista presentará “La cúpula de las banderas del amor”, con 23 lienzos de corazones que rodearán “El laberinto trujillano”, un ataúd de cristal lleno de fotografías embadurnadas de pintura procedentes del álbum de la Feria de la paz y la confraternidad del mundo libre, exposición internacional realizada en 1955 como parte de la megalomanía trujillista.
“Ese álbum lo reciclé hasta formar abanicos rosados y azules, colocándolos luego dentro del ataúd de cristal y rodeándolo todo con banderas de corazones; pues, para mí, la única forma de superar completamente los problemas políticos y sociales es traer al mundo más amor”, indica Santana.
Para el arquitecto y pintor criollo, la instalación inédita simboliza el poder enterrar de manera artística el legado de Trujillo en el Palacio de Bellas Artes, denunciar la opresión de la época y proponer el amor como única cura para las heridas del pasado.
Cuadros y dibujos
La exhibición integra seis cuadros de tamaño mural que representan el renacimiento tras la etapa de oscuridad, mediante los espíritus del mar, la tierra, el fuego, los ríos, la maternidad del mar y la mutación de la naturaleza.
“Otro de los grandes problemas de nuestro país y del mundo es la destrucción de los recursos naturales; por lo cual, estas obras dan paso a otros diez cuadros que siguen la temática ecológica”, expone Santana.
A continuación, y como contrapunto a esta tragedia, el artista criollo presenta un espacio con dibujos arquitectónicos que sugieren el poder de edificación de obras nuevas por parte del ser humano.
“Los dibujos están instalados en el piso de la sala, recalcando la necesidad de enterrar el triste pasado para salvarnos, para encontrar las esencias de la naturaleza, reconstruir las ciudades y ondear las banderas del amor; porque de eso trata la vida, de morir y de renacer, en un eterno ciclo de regeneración”, concluye.