El ministro de Seguridad Nacional de Israel, Itamar Ben Gvir, ha afirmado este lunes que tras el inicio de la guerra con Hamás su cartera llegó a emitir «hasta 3.000 permisos» al día para portar armas de fuego, frente a los 100 diarios que se expedían antes del conflicto.
Ben Gvir precisó que, desde el 7 de octubre, se han presentado en su Ministerio más de 260.000 nuevas solicitudes para portar armas. «Mi política dentro de la Oficina era permitir que el mayor número posible de personas obtuviera un arma», afirmó citado por The Times of Israel.
Mientras, el jefe de la División de Armas de Fuego del Ministerio de Seguridad Nacional de Israel, Yisrael Avisar, dimitió el domingo tras conocerse los reportes de que confidentes de Ben Gvir aprobaron licencias para portar armas sin tener autoridad legal para ello, reporta Haaretz.
El periódico señala que 82 funcionarios recibieron el título de «funcionario temporal encargado para conceder licencias» después de un solo día de formación, mientras que el procedimiento habitual requiere de al menos un mes de formación oficial.
Los funcionarios encargados de conceder las licencias tienen la tarea de examinar a los solicitantes, asegurarse de que cumplen los requisitos de salud mental y física para poseer un arma de fuego y comprobar que recibieron la formación necesaria.
Según fuentes de seguridad, algunos de estos funcionarios aprobaron entre cientos y miles de licencias para portar armas de fuego en las últimas semanas. Además, una indagación inicial sugiere que se concedieron licencias a personas que no cumplen los criterios.
En este contexto, un alto funcionario de seguridad israelí expresó a Haaretz que «este comportamiento es una receta para el desastre». «Están repartiendo armas como si fueran caramelos. Un permiso de armas no es un juego de niños. Casi no hay supervisión en el Ministerio», declaró.
La mayoría de críticas estarían dirigidas contra Avisar, que presuntamente cedió a las exigencias de Ben Gvir y permitió su comportamiento.
Fuente RT