La vicepresidenta de EE.UU., Kamala Harris, reveló esta semana durante una entrevista con CBS que su mayor fallo en el cargo hasta la fecha ha sido no salir de Washington D.C. con más frecuencia.

Harris achacó esta circunstancia a la pandemia, que la ha mantenido en «una burbuja» y no le ha permitido relacionarse directamente con los estadounidenses de a pie.

«Lo digo sinceramente por varias razones», señaló la vicepresidenta, antes de explicar que cuando ella y el presidente Joe Biden llegaron la Casa Blanca, «el covid ya había comenzado, la pandemia había comenzado» y, por lo tanto, no podían viajar.

«Sabes, una gran parte de la relación que él y yo hemos construido ha sido estar en esto juntos en la misma oficina durante horas y horas, haciendo Zooms o lo que sea, porque no podíamos salir de D.C.», argumentó Harris. En este sentido, subraya «la importancia crucial» del derecho de los ciudadanos de «saber y creer que su gobierno realmente los ve y los escucha«.

Harris viene siendo desde hace varios meses blanco de ataques y de críticas por el papel que desempeña en la crisis migratoria, que se agrava en EE.UU.

El reciente anuncio de un proyecto de inversiones de compañías privadas por un monto de 1.200 millones de dólares en América Central tampoco ha logrado revertir la tendencia de la popularidad de la demócrata, que sigue cayendo.

Por otro lado, Harris ha sido acusada de maltrato psicológico por numerosos exempleados.

Paralelamente, miembros importantes de su equipo, como Symone Sanders, su portavoz, y la directora de comunicaciones, Ashley Etienne, anunciaron recientemente que abandonan la Casa Blanca.

Fuente RT