La deuda mundial, que incluye pasivos de los gobiernos, sector privado y hogares, llegó a casi 305 billones de dólares al terminar el primer trimestre de 2023, según un informe publicado esta semana por el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF).
Esta cifra representa un incremento de 8,3 billones de dólares en los primeros tres meses del año, siendo el más elevado desde el primer trimestre del año pasado y la segunda lectura trimestral más alta de la historia.
El informe advierte que la combinación de niveles de deuda tan altos y el aumento de las tasas de interés ha elevado el costo del servicio de los pasivos, lo que genera preocupaciones sobre el apalancamiento en el sistema financiero.
«La deuda global es ahora 45 billones más alta que su nivel previo a la pandemia y se espera que continúe aumentando rápidamente», vaticinó el IIF. «Con las condiciones financieras en sus niveles más restrictivos desde la crisis de 2008-09, una crisis crediticia provocaría tasas de incumplimiento más altas y daría lugar a más ‘empresas zombis’, que ya son casi el 14 % de las empresas que cotizan en EE.UU.», aseveró.
El envejecimiento de la población y el incremento de los costos de atención médica continúan ejerciendo presión sobre los gobiernos, mientras que también «se espera que el aumento de las tensiones geopolíticas impulse más aumentos en el gasto de defensa nacional a mediano plazo», señaló el reporte.
«Si esta tendencia continúa, tendrá implicaciones significativas para los mercados de deuda internacionales, particularmente si las tasas de interés se mantienen altas por más tiempo», subrayó.
Mercados emergentes
Por otra parte, se da cuenta de que el 75 % de los mercados emergentes analizados experimentaron un alza en los niveles de deuda, con una cifra total que superó por primera vez los 100 billones de dólares. China, México, Brasil, India y Turquía registraron los mayores incrementos.
No obstante, el IFF observa que algunos de los mayores mercados emergentes se han beneficiado de la relativa debilidad del dólar, que ha atraído a los inversores a su deuda en moneda local.
En cuanto a los mercados desarrollados, Japón, EE.UU., Francia y el Reino Unido registraron los aumentos más pronunciados durante el trimestre estudiado.
Fuente RT