La República Dominicana elige este domingo a su próximo presidente, a los senadores y diputados al Congreso Nacional.
Más de 8 de los 11,2 millones de dominicanos están llamados a las urnas para este proceso donde también se renueva el Congreso.
Los colegios electorales habilitados abrirán a las 7:00 de la mañana locales y cerrarán a las 5:00 de la tarde. El primer boletín de resultados está previsto tres horas después.
“Que mañana sea una verdadera fiesta de la democracia”, dijo el mandatario el sábado. “Que vayan a votar, por el que decidan, pero que vayan a ejercer el voto”.
Es la segunda elección que el país organiza este año, después de las municipales de febrero en las que el Partido Revolucionario Moderno (PRM) de Abinader se impuso en 120 de las 150 alcaldías.
Expertos afirman que esos comicios sirvieron de termómetro para la presidencial.
La campaña cerró el jueves sin grandes actos proselitistas. Abinader hizo una fiesta televisada con música, fue entrevistado por niños, habló con seguidores por videollamada y reiteró su promesa de combatir la corrupción y “defender” la soberanía de su país, aunque sin hacer referencia directa a Haití.
Difundió un video que alternaba imágenes de las hermosas playas del país y la zona fronteriza. “Somos los mejores anfitriones del mundo, nuestras puertas están abiertas”, decía el locutor. “Pero si detectamos el más mínimo riesgo tenemos derecho de cerrarlas, por eso la frontera nunca va a ser la misma”.
Abinader goza de una aprobación de 70%, en parte por su dura política hacia la migración haitiana.
– Compra de votos –
Leonel Fernández denunció un aumento del gasto público por la campaña y alertó sobre una posible compra de votos.
“Hay que estar vigilantes”, dijo el viernes a periodistas tras reunirse con una misión de la OEA, parte de los más de 400 observadores internacionales que acompañarán el proceso. “Es una práctica que utilizó masivamente el gobierno en febrero y que no queremos que se repita en esta ocasión”.
Es en todo caso una vieja práctica de la política dominicana: comprar votos a cambio de unos 500 pesos (8 dólares) o un “pica pollo”, un plato de pollo con papas fritas.
“Yo espero que no haya ningún truco, que gane el que sea, pero por vía legal”, dijo José Cordero, un motorista de 49 años.
En esta elección será importante el voto en el exterior, que representa el 11% del padrón electoral con unos 863.785 electores