El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha confirmado que seis ciudadanos mexicanos se encuentran entre las víctimas del tiroteo registrado este sábado en la ciudad estadounidense de El Paso, estado de Texas.
«Lamentablemente seis mexicanos perdieron la vida y hay siete heridos», ha declarado el mandatario mexicano.
En ese contexto, el presidente azteca ha expresado su «solidaridad para las familias de las víctimas» y ha precisado que los gobernadores de los estados de los que proceden las víctimas ya han recibido instrucciones de ayudar «en todo en estos momentos difíciles».
«Lamentamos estos hechos y reafirmamos nuestra convicción de que no deben enfrentarse los problemas sociales con el uso de la fuerza y con la incitación al odio; tenemos que buscar la manera de resolver en todas partes nuestros problemas con la fraternidad universal», ha subrayado López Obrador.
Poco antes, el secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Luis Ebrard, anunció que después del tiroteo en Texas el Gobierno de su país emprenderá acciones legales para proteger a la comunidad mexicana en EE.UU. En un mensaje a través de su cuenta de Twitter, Ebrand manifestó la «indignación de México» ante la masacre y aseguró que la nación dirigirá sus esfuerzos hacia la protección de las familias afectadas y posteriormente en tomar acciones legales «eficaces, prontas, expeditas y contundentes».
