El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, informó este viernes que se reunió con Mario Escobar y Dolores Bazaldúa, los padres de Debanhi Escobar, la joven de 18 años cuyo cadáver fue hallado el 21 de abril dentro de la cisterna de un motel en las afueras de Monterrey, en el estado de Nuevo León.
«Ya me reuní con ellos ahora en la mañana. Gente muy buena, un maestro, su esposa. Y pues como padres están muy dolidos, desechos«, dijo el mandatario durante su conferencia matutina, celebrada en Monterrey.
De acuerdo con López Obrador, se comprometió a que su Gobierno ayudaría a «esclarecer lo sucedido», a «que no haya impunidad y que se pueda siempre hacer justicia».
Asimismo, el subsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía, detalló en la conferencia de prensa que se conformó un grupo interinstitucional que colaboraría en la investigación que realiza la Fiscalía General de Justicia del estado de Nuevo León.
En ese sentido, Mejía recordó que la carpeta de investigación del caso fue reclasificada como delito de feminicidio y que se agotarán todos los protocolos necesarios en la indagatoria judicial.
Desaparición y hallazgo del cadáver
Debanhi Escobar fue reportada como desaparecida el pasado 9 de abril y su cuerpo fue localizado dentro de una cisterna 12 días después. Tras realizar la primera necropsia, la Fiscalía de Nuevo León informó que la causa de muerte de la joven fue contusión profunda de cráneo. En ese momento, se tuvo la hipótesis de que pudo haber caído por accidente a la cisterna.
No obstante, una segunda necropsia independiente, a la que accedió el medio El País, determinó que Escobar perdió la vida por una «hemorragia intracraneal que provocó un choque neurogénico y, este, un paro respiratorio». Además, el documento señala que el cuerpo presentaba «huellas de una relación sexual vaginal, violenta y reciente«, lo que implica que fue víctima de abuso sexual, y posteriormente, fue asesinada.