El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, rechazó este lunes que se hayan clasificado como reservados por 5 años los videos en los que se muestra lo que ocurrió durante el trájico incendio en un centro de detención de migrantes en Ciudad Juárez, que se saldó con 40 muertos el pasado 27 de marzo.
«No soy partidario de que se oculte la información, no sé por qué lo hicieron«, declaró este lunes durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.
Según revela este lunes el diario El Universal, el Instituto Nacional de Migración (INM), gestor del centro, adoptó esa medida hasta 2028 con el argumento de que la difusión de esas imágenes podría poner en riesgo la vida de los empleados de la institución, a los que se señala de dejar a los migrantes encerrados en las celdas a pesar de las llamas.
«Voy a preguntar para que se permita toda la información, a veces los abogados lo hacen por el llamado debido proceso, pero en estos casos, que además de trágicos y dolorosos, los usan nuestros adversarios, y ustedes por ejemplo en El Universal, para golpearnos, responsabilizarnos de todo«, dijo López Obrador.
«Quien nada debe, nada teme»
A pesar de la medida, el mandatario se comprometió a pedir un informe que explique las razones de la decisión, aunque se mostró reacio a censurar ese material.
«Pues no hay que dar motivo. ¿Por qué ocultar las cosas? El que nada debe nada teme», agregó López Obrador. Según el diario, «una mala difusión» de los videos pondría también en riesgo a los migrantes que presenciaron el delito.
Hasta ahora, la versión que maneja el Gobierno -y que fue reiterada este lunes por el mandatario mexicano– es que los migrantes retenidos en ese centro «le prendieron fuego a unas colchonetas de nylon» a modo de protesta para que les permitieran salir.
«No imaginaron que con el fuego, sobre todo el humo, se iban a intoxicar los que estaban porque la puerta estaba cerrada, había un candado. Parece que quien manejaba la puerta y tenía la llave, no estaba y fue muy lamentable, una tragedia«, agregó.
Las autoridades ya detuvieron a varios responsables. La Fiscalía los ha acusado penalmente por la muerte de los migrantes, entre los que había ciudadanos centroamericanos y sudamericanos.