Algunos de los monumentos más importantes del mundo se iluminaron con los colores del Reino Unido en homenaje a la Reina Isabel II, quien falleció este jueves a las 96 años y otros se apagaron, como la Torre Eiffel, en París.
El Cristo Redentor en Brasil se tiñó con los colores británicos, después de que el gobierno de Jair Bolsonaro decretara tres días de luto. En tanto, el icónico edificio Empire State Building, en Manhattan, lució purpura, el color de la realeza.
El deterioro de la salud de Isabel II se aceleró en los últimos días. El martes había recibido al primer ministro dimisionario, Boris Johnson, y a su sucesora, Liz Truss, en Balmoral, renunciando por primera vez en su largo mandato a celebrar este acto protocolario en Londres, para evitar un viaje de 800 km.
Dos días después, sus médicos se declararon “preocupados por la salud de su majestad y recomendaron que permanezca bajo vigilancia médica”.
La muerte de Isabel II fue “una gran conmoción para la nación y para el mundo”, aseguró Truss en un breve discurso a las puertas de Downing Street, mientras llovían mensajes de condolencias de todo el planeta, desde el presidente estadounidense Joe Biden hasta el ruso Vladimir Putin.
Como “una abuela»
Unamultitud se congregó frente al palacio de Buckingham en Londres pese a una fuerte lluvia. Cantaron desolados “Dios salve a la reina” cuando se conoció su fallecimiento.
“Me siento muy triste, tengo la impresión de que mi abuela ha muerto”, dijo Tonnie Cunningham, una mujer de 35 años entrevistada por AFP en las calles de Londres.
“Es la única monarca que he conocido”, decía Margaret Caselton, de 75 años.
Televisiones y radios interrumpieron sus programas para anunciar el deceso de la soberana, cuya imagen monopoliza las portadas de la prensa británica.
“Buenas noches Señora”, dice el tabloide The Sun. “Gracias Señora… por todo”, titula el Daily Mirror. Por su parte, The Times destaca que su “reinado estuvo marcado por un compromiso inquebrantable hacia su pueblo y su país”.
El partido del Manchester United contra la Real Sociedad en la Europa League sí se celebró el jueves, pero se guardó un minuto de silencio antes del comienzo y los jugadores llevaron brazaletes negros.
Infobae