DALLAS. Los Mavericks de Dallas tuvieron un partido colectivo para ganar el primer partido de la final de la NBA y evitar la barrida ante los Celtics de Boston este viernes.
Los Mavs estaban contra la espada y la pared, pero logró estirar la definición de las Finales de la NBA a un quinto partido. Esta noche, en su casa, vapuleó 122-84 a Boston.
La serie ahora está 3-1 a favor de los Celtics. El próximo partido es el lunes a las 8:30 de la noche. La emblemática franquicia de Massachusetts buscará liquidar la serie frente a su gente y ganar el decimoctavo anillo de su historia.
Los “Mavs” mostraron un gran nivel de principio a fin.
Fueron muy intensos en defensas, buscaron los aclarados en ofensiva y sus grandes estrellas brillaron. Luka Doncic terminó con 33 puntos, cinco rebotes y cinco asistencias. Kyrie Irving, por su parte, aportó con 31 tantos y seis asistencias.
En Boston la mejor mano fue Jayson Tatum con 15. Jaylen Brown y Jrue Holiday estuvieron apagados. Dallas sueña con una hazaña. Nunca en la historia de la liga un equipo ha ganado una serie tras arrancar perdiendo los tres primeros partidos.
Como en el partido anterior los Mavericks fueron una tromba en los minutos iniciales, pero la diferencia pasó porque Boston nunca llegó a mostrar algo de reacción. Solo emparejó un poco el marcador en los primeros 4 o 5 minutos por unas canastas de Brown y Tatum y listo.
Dallas en cambio fue inteligente y nunca quitó el pie del acelerador ni se apuró tampoco, y con la tranquilidad de quien juega ya sin nada por perder firmó un partidazo en casa para ganar por 38 puntos de diferencia: 122-84. El récord histórico, del 96-54 de Bulls a Jazz en 1998, quedó cerca.
Fuente: Agencias