SANTIAGO. – Monseñor Tomás Morel, obispo auxiliar de la arquidiócesis de Santiago, resaltó la ardua labor que desempeña el Ministerio de Educación (MINERD) en medio de la pandemia del coronavirus y la continuidad a distancia del año escolar 2019-2020, así como con la planificación del próximo.
Monseñor Morel, dijo que ha sido un gran desafío, no solo para las autoridades del MINERD, sino para los docentes quienes han redoblado sus esfuerzos para continuar las clases de manera virtual y atender sus familias y necesidades personales al mismo tiempo. «Por múltiples razones aseguramos que salir adelante ante un problema mundial, ha sido un gran desafío para la educación de la República Dominicana», agregó.
El prelado católico enfatizó sobre el compromiso asumido por los profesores, el más importante y arduo a la vez: formar personas.» Los maestros deben poseer la vocación de comunicar y transmitir sus conocimientos basados en un conjunto de valores que permita a los jóvenes y niños descubrir sus talentos, sobre todo en una sociedad tan tecnológica y con informaciones por doquier», subrayó.
Las declaraciones fueron ofrecidas en una eucaristía realizada en la Catedral Santiago Apóstol para dar inicio el Mes del Regocijo Magisterial 2020, pese a las limitaciones que provocan las medidas sanitarias adoptadas para evitar la propagación del coronavirus.