El presidente de Chile, Sebastián Piñera, promulgó este jueves la ley de matrimonio igualitario que fue aprobada esta semana por el Congreso, y que convierte a la nación suramericana en la séptima de la región en reconocer este derecho.
«La verdadera libertad se construye reconociéndonos como iguales en dignidad y derechos. Y respetan y valorando la diversidad de identidades, de proyectos de vida», sostuvo el mandatario durante la ceremonia realizada en La Moneda, quien reconoció que su postura sobre el matrimonio igualitaria era otra, pero que «evolucionó».
Para Piñera, la entrada en vigor de la ley no solo constituye un hecho histórico, sino que invita a «reflexionar porque en Chile y el mundo los crímenes de odio han aumentado». Del mismo modo, instó a quienes no están de acuerdo con la ley a evaluar sus posturas a la luz de nuevas perspectivas.
«Así como es importante actuar en la vida con convicciones profundas, también es importante el poder evolucionar y tener y desarrollar nuevas perspectivas. Pero hay algo en que todos estamos de acuerdo: el Estado siempre debe cumplir su rol fundamental de promover una sociedad libre, diversa, tolerante, inclusiva y, por supuesto, evitar que existan discriminaciones arbitrarias o privilegios entre sus ciudadanos», aseveró.
«Es un día de mucha emoción. Muchas y muchos esperaron mucho tiempo este día», agregó Piñera, tras agradecer a la exmandataria Michelle Bachelet por iniciar el camino para el reconocimiento de esos derechos. «Llegó el tiempo de consagrar la libertad de amar y consagrar familia», apuntó.
¿Qué ofrece la ley?
Además de legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo y de reconocer su derecho a la adopción, la nueva norma garantiza los derechos de filiación a toda persona que se someta a técnicas de reproducción humana asistida, sea cual sea su sexo, orientación sexual o identidad de género.
También respalda la no discriminación por orientación sexual o identidad de género, entre otras categorías, para efectos del régimen y ejercicio del cuidado personal de hijos/as; y elimina el divorcio automático para las personas trans que cambian su nombre y sexo legal.
Por otra parte, abre la posibilidad de que los derechos de filiación de los/as hijos/as pueden determinarse respecto de más de dos personas y establece los derechos laborales de pre y post natal sin discriminación por sexo, orientación sexual o identidad de género.
Sobre este particular, Piñera destacó este jueves que en su país, con la nueva ley, «ya no pueden existir familias de primera y segunda categoría».
Fuente: RT