El presidente de Rusia, Vladímir Putin, y su homólogo chino, Xi Jinping, mantienen este miércoles una reunión virtual en la que abordarán las relaciones bilaterales en diversos ámbitos, así como cuestiones relacionadas con la situación mundial y regional.
El encuentro se celebra en medio de varios desafíos de política exterior para ambas naciones. Para Rusia, estos desafíos están relacionados con la actividad de la OTAN en el territorio de sus países vecinos y con las tensiones en torno a Ucrania, mientras que China se enfrenta a alianzas en su contra en la región del Indo-Pacífico y a la actividad en torno a Taiwán: la isla que Pekín considera parte de su territorio y con la que EE.UU. mantiene estrechas relaciones.
«Un verdadero ejemplo de cooperación interestatal»
Vladímir Putin declaró que las relaciones entre Moscú y Pekín son «un verdadero ejemplo de cooperación interestatal en el siglo XXI».
«Un nuevo modelo de cooperación se ha creado entre nuestros países, basado, entre otras cosas, en fundamentos como la no intervención en los asuntos internos y el respeto a los intereses mutuos, la determinación de convertir a la frontera conjunta en un cinturón de paz eterna y buena vecindad«, afirmó el mandatario ruso al comienzo de la reunión virtual.
El jefe de Estado ruso destacó que al mismo tiempo se están fortaleciendo las relaciones económicas y comerciales entre las dos naciones y los intercambios comerciales crecieron un 31 % entre enero y noviembre de este año, hasta los 123.000 millones de dólares.
Entre otros ámbitos, Pekín y Moscú colaboran en la lucha contra el coronavirus y China «se convierte en un centro internacional de producción de las vacunas rusas Sputnik V y Sputnik Light», afirmó Putin, agregando que se firmaron contratos para producir más de 150 millones de dosis con seis fabricantes chinos.
«Un período de turbulencia y grandes cambios»
Xi, a su vez, declaró que su homólogo ruso «apoyó firmemente los esfuerzos de China para defender a los intereses nacionales clave y se opuso enérgicamente a los intentos de crear una brecha» entre ambos países, destacando que «valora mucho» estas acciones.
En ese contexto, el líder chino indicó que «el mundo entró en un período de turbulencia y grandes cambios», pero las relaciones ruso-chinas «mostraron una viabilidad sólida y recibieron un nuevo aliento».
Fuente RT