El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha vuelto a referirse a las tensiones en torno a la posible incorporación de Ucrania a la OTAN, así como a las propuestas de Moscú a Washington y sus aliados en el bloque en materia de seguridad. Las declaraciones ofreció este martes en una rueda de prensa tras reunirse con el primer ministro de Hungría, Víktor Orbán.
Durante su intervención, el mandatario recordó una vez más las promesas de la Alianza Atlántica formuladas verbalmente en los años 90 acerca de que no se expandiría «ni una pulgada» hacia el este tras la unificación de Alemania. «Nos engañaron», aseveró, aludiendo a la incorporación de naciones como Polonia, Rumania y los países del Báltico, entre otros.
En paralelo, Putin mencionó la salida unilateral de EE.UU. del Tratado sobre Misiles Antibalísticos en 2002, pese a los llamamientos de Moscú de no hacerlo. Esto, a su vez, permite instalar los misiles ofensivos Tomahawk, lo que representa una amenaza para Rusia, según el presidente.
¿Un escenario de guerra entre Moscú y la OTAN?
En lo que concierne a una posible adhesión de Kiev a la Alianza, Putin señaló que los documentos doctrinales de Ucrania constatan que el país quiere retomar la península rusa de Crimea, incluso por vía militar. El jefe del Estado recalcó que si Ucrania, que últimamente está siendo militarizada activamente por Occidente, se incorpora y lanza un ataque en Crimea, Rusia tendría que enfrentarse contra la OTAN.
«Imaginémonos que Ucrania sea un miembro de la OTAN: esté plagada de armas con la instalación de sistemas ofensivos contemporáneos al igual que Polonia y Rumania […] y empiece una operación militar en Crimea. Esto es territorio soberano de Rusia […] ¿Tenemos que entrar en guerra con el bloque de la OTAN? ¿Alguien ha pensado algo al respecto? Aparentemente no», aseveró el mandatario.
Cumplimiento de los acuerdos de Minsk
Además, Putin hizo mención a los acuerdos de Minsk, sellados en 2015 para frenar el conflicto en el este de Ucrania. El líder ruso destacó que a Moscú siempre le acusan de no cumplir con las estipulaciones del pacto, mientras aseguran que Kiev sí quiere aplicarlas.
«Y al mismo tiempo hay declaraciones públicas de que si Ucrania aplica los acuerdos de Minsk, se desmoronará. ¿Nadie ha pensado que al plantear tales amenazas a Rusia, crea amenazas similares para sí misma?», cuestionó.
¿Seguridad de Ucrania o contención de Rusia?
El mandatario reconoció que cada país tiene derecho a elegir su propio sistema de seguridad. Sin embargo, Putin consideró que EE.UU. no está tan preocupado por la seguridad de Ucrania y la usa como una «herramienta» para «contener el desarrollo de Rusia«.
En este sentido, el presidente mencionó posibles vías de cómo se llevaría a cabo la contención de Moscú.
- Involucrar a Rusia en un conflicto militar e introducir sanciones severas, una posibilidad ya contemplada por Washington y sus aliados europeos.
- Incluir a Ucrania en la OTAN, desplegar allí sistemas de armas ofensivos e instigar a los grupos radicales ucranianos a resolver de forma bélica el problema de Donbass y de Crimea, lo que implicaría el involucramiento de Rusia.
Respetar los intereses de todos
El mandatario ruso subrayó que la OTAN defiende su política de puertas abiertas, apelando a la «libre elección» de cada país sobre su incorporación a la Alianza. Sin embargo, según Putin, esta política no está consagrada en ningún documento, al tiempo que recordó que no es posible reforzar la seguridad de ciertas naciones a expensas de otras.
Paralelamente, sugirió el modo en que Washington y los miembros de la Alianza Atlántica podrían formular su rechazo a las aspiraciones de Ucrania para formar parte del bloque militar.
«Queremos garantizar su seguridad. Lo valoramos. Respetamos sus aspiraciones. Pero no podemos aceptarlo, porque tenemos otros compromisos internacionales previos. ¿Qué es lo incomprensible o incluso ofensivo para Ucrania en este caso?», se preguntó el jefe del Estado.
Finalmente, Putin precisó que Moscú solo aboga por evitar «un escenario negativo» de la situación, pero para ello hace falta tener en cuenta los intereses de todos los países, incluyendo los de Rusia.
Fuente RT