El expresidente de Egipto, Mohamed Mursi, falleció este lunes a causa de un ataque cardiaco mientras era juzgado en un tribunal por caso de espionaje, según reporta la televisión estatal de ese país citando a una fuente médica.
De acuerdo con la información suministrada, Mursi sufría un tumor benigno para cuyo tratamiento recibía atención médica de manera continuada, recoge Reuters.
El deceso del exmandatario, de 67 años, se produjo luego de que solicitara al juez el derecho de hablar. Al finalizar su intervención, perdió el conocimiento y fue trasladado un hospital, donde ingresó muerto. Hasta el momento no estaba clara la causa del óbito y si el político islamista falleció durante el juicio o inmediatamente después de la sesión.
Además de por espionaje, el depuesto presidente estaba siendo juzgado junto a otros miembros del movimiento islamista Hermanos Musulmanes —que actualmente figura en la lista de los grupos terroristas en Egipto y varios otros países— por fugarse de la cárcel de Wadi Natrun, incendiar el penal y facilitar la huida de presos durante la revolución de 2011. Además, se le imputaba la agresión a funcionarios del presidio y la destrucción de documentos del mismo.
Mohamed Mursi ocupó la Presidencia de Egipto entre 2012 y 2013, cuando fue destituido del cargo por un golpe militar.
