Donald Trump, presidente de EE.UU. entre 2017 y 2021, exigió la conformación de un jurado para discernir sobre las acusaciones que se le hacen y afirmó que la fiscal general de Nueva York, Letitia James, «no tiene caso». Así lo planteó al prestar testimonio este lunes en el juicio civilabierto en su contra por presunto fraude, informan medios locales.
James, del Partido Demócrata, demandó el año pasado al político, a sus hijos y a la Organización Trump, acusándolos de haber inflado su patrimonio neto hasta en 2.230 millones de dólares en los estados financieros anuales presentados a varias compañías, con lo que busca que se le imponga al exmandatario una multa de 250 millones de dólares por daños y perjuicios, así como la prohibición de hacer negocios en el mencionado estado.
Trump aseguró que no ha cometido delito alguno y sostuvo varias veces que sus activos estaban incluso infravalorados. Además, detalló que sus estados financieros contenían cláusulas de exención de responsabilidad, en las que se solicitaba a las empresas que evaluaran las cifras en cuestión.
«Es una desgracia»
Trump testifica este lunes en el juicio civil abierto contra él por fraude
«Creo que este caso es una desgracia […] Es una vergüenza. Es una interferencia electoral, porque usted quiere mantenerme en el tribunal todo el día», declaró el ahora precandidato presidencial republicano para las elecciones generales de 2024, después de testificar durante más de cinco horas. «Y… juez […] quiero un jurado», añadió.
Asimismo, aseguró que están tratando de hacerle daño a su persona, especialmente James, «por razones políticas». En ese sentido, aseveró que la fiscal utiliza su investigación y la demanda en su contra con la intención de «convertirse en gobernadora, para luego convertirse en fiscal general».
«Controlen a su cliente»
«Esto es una caza de brujas de corte político, y ella debería avergonzarse de sí misma. El fraude es ella», continuó, tras lo cual arremetió contra el juez Arthur Engoron, diciendo que falló en su contra sin saber nada sobre él, en referencia a la sentencia dictada el pasado mes de septiembre.
En este punto, criticó a Engoron —que trató de interrumpirlo para que no diera largas respuestas al interrogatorio de los abogados del Estado y pidió a los letrados de Trump que «controlaran a su cliente»— por infravalorar su residencia en Mar-a-Lago, Florida, al estimar su precio en 18 millones de dólares. «Es mucho más valiosa», concluyó el exinquilino de la Casa Blanca.
Fuente RT