El presidente de EE.UU., Donald Trump, tiene previsto proponer a una mujer como jueza de la Corte Suprema para que ocupe el puesto de la recientemente fallecida Ruth Bader Ginsburg, según lo declaró este sábado, informan medios locales.
«El artículo II de nuestra Constitución dice que el presidente nombrará a los magistrados de la Corte Suprema. No creo que pueda ser más claro, ¿verdad? No lo creo», declaró el mandatario durante un mitin pronunciado en un hangar del Aeropuerto de Fayetteville (Carolina del Norte). «¡Ocupa la silla!», añadió.
«Una gigante legal»
Trump, que empezó su discurso recordando a Ginsburg como una «gigante legal», dijo que se tomará como un «deber moral» el hecho de confirmar un nuevo juez antes de enero. «Presentaré un candidato la semana que viene, será una mujer», anunció el inquilino de la Casa Blanca, detallando que tienen muchas candidatas para desempeñar el cargo.
El Partido Republicano ha sido duramente criticado por el Partido Demócrata por adoptar un «enfoque hipócrita» a la hora de ocupar el puesto de Ginsburg.
Tras la muerte del juez Antonin Scali, en febrero 2016, el líder de la mayoría del Senado, el republicano Mitch McConnell, se negó a considerar al candidato del presidente Barack Obama para ocupar su lugar en la Corte Suprema, argumentando que las elecciones presidenciales estaban demasiado cerca. Ahora McConnell planea dar apoyo al candidato de Trump.
¿Quién fue Ginsburg?
Considerada un icono del movimiento de la lucha por los derechos de las mujeres, Ginsburg falleció este viernes en su casa de Washington a los 87 años por un cáncer de páncreas metastásico.
La jueza votó en repetidas ocasiones para limitar la aplicación de la pena capital, y durante su mandato la corte declaró inconstitucional que se ejecute a personas que padecen discapacidad intelectual y a los menores de 18 años. Además, defendió el derecho al aborto y luchó contra de la discriminación racial en el voto y la discriminación salarial de las mujeres.
Durante la campaña presidencial de 2016, la jueza se opuso a Donald Trump en una serie de entrevistas concedidas a los medios. Según NPR, días antes de su muerte le dictó la siguiente declaración a su nieta Clara Spera: «Mi más ferviente deseo es que no me reemplacen hasta que sea instalado un nuevo presidente».
Fuente: RT
